El Micelio, voces y territorio
Bajo la superficie del suelo se extiende una red invisible que hilvana la vida: el micelio.
Este entramado, tejido de hifas de hongos, convierte lo indivisible en nutrientes que dispone para un nuevo renacer al transformar la materia en descomposición en nueva vida. Además, regula con delicadeza el pulso del bosque: atenúa los excesos, abre camino a los más vulnerables y mantiene la armonía esencial. El micelio demuestra que la cooperación en el reino Fungi es una forma profunda de inteligencia natural.
En las redes humanas, el micelio es pilar de la conciencia al entrelazarse con el saber y las culturas. Nos recuerda que de la tierra no solo brota el alimento que nos sostiene, sino también la chispa que enciende la creatividad y el impulso que mueve la industria. En su diseño complejo, el reino fungi guarda las soluciones que buscamos para nuestro planeta.
El micelio nos ofrece una conexión sagrada, un hilo invisible que une nuestro ser con la memoria ancestral. Esta unión se materializa en la orfebrería de Darién, donde artesanos prehispánicos capturaron la esencia de este vínculo. Mediante la técnica de la cera perdida, dieron forma al oro y la tumbaga, creando figuras humanas esquematizadas que son, en sí mismas, un testimonio silencioso de la unión del reino fungi y el espíritu humano. También en los wayuú, el pueblo indígena ancestral que habita la árida península de La Guajira, entre Colombia y Venezuela, y quienes tiñen su rostro utilizando tinturas a base de esporas de hongos que crecen en la tierra.
En esta exposición, además, podrás aprender sobre el papel crucial y multifacético de los hongos, sobre su capacidad como agentes de control biológico, con los increíbles hongos entomopatógenos, aquellos parasitan insectos y arañas, convirtiéndolos en huéspedes para su fructificación y descubrirás su potencial como alimento que proporciona beneficios para la salud más allá de la nutrición básica, incluyendo la prevención y el tratamiento de enfermedades.
Toda la muestra está acompañada con una exposición fotográfica de Daniel Klinger, quien desde 2014 ha recorrido la geografía colombiana documentando visualmente la diversidad fúngica de Colombia. donde podrás ver especies de hongos difíciles de encontrar y que revelan su papel esencial en los ecosistemas.